El consumidor del futuro 2027: El poder económico de las emociones


Nuestras emociones se están volviendo un factor crucial en el comportamiento de compra, determinando cómo compramos, qué adquirimos y con qué marcas deseamos interactuar.
La conexiones más profundas impulsan la rentabilidad
En los últimos años, hemos sido testigos de la creciente importancia de las emociones en la sociedad. Las búsquedas en Google relacionadas con "ansiedad climática" o "ecoansiedad" aumentaron un 4590% entre 2018 y 2023, e incluso Disney aprovechó nuestros sentimientos con la exitosa película de animación Inside Out 2, en la que los personajes representan emociones, generando 1690 millones de dólares en ingresos de taquilla a nivel mundial. Esto muestra una oportunidad clave para que las marcas comprendan y satisfagan el deseo de los consumidores de conexiones emocionales más profundas.
Un estudio de Harvard Business Review revela que los clientes plenamente conectados son un 52% más valiosos, lo que genera una mayor frecuencia de compra y recomendaciones. Al comprender las emociones del consumidor, su marca puede influir en la reacción de su audiencia a sus productos y experiencias, lo cual influye en las decisiones de compra y fomenta la preferencia por la marca.
Descarte el “esperar y ver” de su estrategia
Nuestro pronóstico anual, El consumidor del futuro, que más de 31 000 líderes de marca leen cada año, identifica los sentimientos clave que definirán la forma en que los consumidores piensan, sienten y actúan en los próximos años. En el informe de este año, revelamos tres de las seis emociones que influirán en el comportamiento del consumidor en 2027. Esto le permitirá evitar incertidumbres y crear productos y experiencias que conecten directamente con sus pensamientos, sentimientos y comportamientos.
Un adelanto a 2027: Deseo de evasión
El término en inglés, witherwill (deseo de evasión), una palabra acuñada por John Koenig, autor del Dictionary of Obscure Sorrows se define como el anhelo de liberarse de responsabilidades y será una emoción clave del consumidor y un mecanismo de afrontamiento en 2027, a medida que las personas lidian con presiones a múltiples niveles.
El deseo de evasión será una reacción contra el gran agotamiento, con los factores estresantes laborales y digitales creando una sensación generalizada de agotamiento y agobio. A medida que las personas se esfuerzan por explorar una vida más tranquila con menos riesgos, menos tareas pendientes, conexiones más significativas y menos soledad, las marcas tienen la oportunidad de ofrecerles el respiro que necesitan.
Deseo de evasión: El poder del juego
En una era de soledad y estrés, los consumidores buscarán marcas que fomenten la alegría como un valor añadido a sus compras; el 54% de los consumidores globales afirman querer una sensación de alegría al comprar por internet (*Criteo).
Al crear campañas online u offline, las marcas deben aprovechar la inteligencia infantil, utilizando una mentalidad infantil para generar ideas innovadoras. Esto atraerá al creciente grupo de consumidores adultescentes y aprovechará la nostalgia, un sentimiento que puede animar a las personas a gastar más.
Un estudio global de **LEGO reveló que el 85% de los padres cree que el juego es clave para fomentar una visión del mundo más inclusiva. Esto respalda la idea de que el juego es una necesidad humana vital, no solo para los niños, sino para todas las generaciones.
Explore el informe de nuestro pronóstico anual, El consumidor del futuro 2027: Emociones, donde revelamos tres emociones clave que influirán en el comportamiento del consumidor a medida que nos acercamos a 2027, para ayudar a impulsar el éxito a largo plazo de su marca.